Ingredientes:
- un vaso con agua (el vaso es la medida (200 ml., para unas 12 raciones))
- un vaso con harina
- un pellizco de sal
- un chorrito de aroma de vainilla al gusto
- aceite de girasol
- Azúcar
Utensilios:
Lengua pastelera Wok/Cacerola Churrera
Preparación:
Cogemos el vaso con agua, lo vertemos en un bote y lo ponemos a calentar. Añadimos el pellizco de sal y el aroma de vainilla.
Esperamos a que entre en ebullición y de una sola vez, añadimos el vaso de harina y lo removemos bien para que quede todo bien integrado. Lo apartamos del fuego y esperaremos que se temple un poco. Con la ayuda de una lengua pastelera, lo introducimos dentro de una churrera y haremos los churros. Los iremos colocando, sobre una hoja de papel de hornear para que no se nos peguen, dándoles la forma deseada, rectos o en este caso forma de lazo y los reservamos.
En un wok o cacerola con abundante aceite de girasol, calentamos a 180ºC más o menos. Iremos poniendo los churros unos 4 a 5 minutos (poner pocos churros sin dejar de mover el aceite, para que no se peguen entre si). Ya tenemos nuestro churros hechos, los cuales podemos rociar con un poco de azúcar al gusto.