Mejillones a la marinera

Ingredientes:

  • Mejillones
  • Ajos
  • Cebolla
  • Tomate
  • Aceite de oliva
  • Laurel
  • Sal (opcional)
  • Pimienta
  • 1 vaso de vino blanco
  • 2 cucharadas de Maicena

Preparación:

  1. Limpiaremos muy bien los mejillones y reservaremos.
  2. Sin mezclar, picaremos muy finamente los ajos, la cebolla y el tomate y lo reservaremos.
  3. Pondremos un buen chorro de aceite en la sartén. Añadiremos los ajos removiendo y teniendo el fuego muy lento. Incorporaremos la cebolla, el laurel, la sal, la pimienta, las dos cucharadas de Maicena, el tomate y el vaso de vino.
  4. Dejaremos que reduzca ligeramente, añadiremos los mejillones y taparemos la cazuela dejándolos de 3 a 5 minutos.
  5. Una vez se hayan abierto todos los mejillones, apagaremos el fuego y lo dejaremos reposar.

Ya tenemos nuestros mejillones a la marinera listos.

Hummus

Ingredientes:

  • 1 Frasco de garbanzos cocidos
  • 2-3 Ajos
  • Zumo de un limón
  • 2 Cucharadas soperas de tahina
  • 1 Chispa de sal y pimienta al gusto
  • Un buen chorro de aceite de oliva

Preparación:

  1. Escurriremos los garbanzos, dejando un chupito del caldo para añadir luego o si se prefiere, agua muy fría.
  2. Lavaremos los garbanzos con el objetivo de sacar las máximas pieles posible.
  3. Los pondremos en un vaso picador y agregaremos el resto de ingredientes.
  4. Lo picamos, hasta que nos quede una crema espesa pero suave. Si queremos la crema más suave, añadiremos el chupito de los garbanzos o el agua. Es al gusto.

Ya tenemos nuestro Hummus hecho.
Para guardar, lo pondremos en un recipiente, con una fina capa de aceite de oliva Virgen por encima.

P.D. Con esta base de Hummus, podemos hacer miles de variantes, añadiéndoles los ingredientes escogidos. Ejemplos: Aguacate, moniato asado, cebolla caramelizada, mermelada de tomate, etc. Imaginación al poder.

Flores

Ingredientes:

  • 250 g de leche
  • 1 huevo
  • 1 pizca de sal
  • 200 g de harina
  • Anís o naranja al gusto (aroma)
Decoración:

Canela y azúcar

Preparación:

  1. Batiremos la leche con el huevo. Lentamente, añadiremos la pizca de sal y el aroma que hayamos preferido.
  2. Mientras vamos batiendo con el tenedor, iremos agregando la harina. La masa, nos tiene que quedar lisa y sin grumos. Podremos ayudarnos de unas varillas o de una batidora.
  3. Dejaremos reposar la masa unos 20 minutos, que espese un poquito.
  4. Pasaremos a freírlas en aceite bien caliente.
  5. En la masa que hemos hecho, tenemos que sumergir los rosetones no totalmente, sino que nos quede el borde superior de la flor, fuera.
  6. Siempre tendremos el rosetón puesto en el aceite caliente, así evitaremos que la masa se nos pegue en el rosetón, una vez introducido en el aceite.
  7. Una vez lo hayamos sumergido en la masa, lo pasaremos a sumergir en el aceite, sacudiéndolo ligeramente para que se despegue fácilmente.
  8. Lo dejaremos que se dore. Ya tenemos listas nuestras flores para comer.
  9. La decoración, la haremos al gusto con azúcar y canela.