Ingredientes:
- 500 g de harina
- 100 ml de aceite de oliva
- Canela en rama
- Anís estrellado
- Piel de una naranja y de un limón
- 100 ml de vino blanco dulce
- 1 pizca de sal
- 100 ml de zumo de naranja
- Matalahúva (anís)
- Aceite para freír
- Azúcar o miel para decorar
Preparación:
- En un bol pondremos de 350 a 370 g de harina, reservando el resto.
- Aromatizaremos el aceite poniéndolo al fuego y añadiendo la canela, el anís estrellado y las pieles de naranja y de limón, dejándolo que llegue a una temperatura moderada. Reservaremos hasta que se nos templen.
- Una vez templado, lo añadiremos a la harina que tenemos reservada, colándolo primero y mezclándolo hasta que se integre.
- Continuaremos añadiendo el vino, la pizca de sal, el zumo de naranja y el anís matalahúva, un par de cucharadas o al gusto.
- Lo integraremos todo bien e iremos añadiendo el resto de harina que tenemos reservada, hasta que nos quede una masa compacta, pero que no se pegue a las manos.
- Una vez tengamos la masa, la pondremos sobre el mármol, la amasaremos un par o tres de minutos formando una bola y la dejaremos reposar, unos 10 o 15 minutos más o menos. Ya tenemos nuestra masa preparada para hacer nuestros pestiños.
- Con la ayuda de un rodillo, pasaremos a extender media masa, dejándola en 1 o 2 mm de grosor aproximadamente, esto va al gusto y así según el espesor que hagamos nos quedaran más o menos crujientes.
- Cortaremos cuadrados y uniremos un extremo al otro (vértices opuestos), haciendo pequeños lazos. Los dejaremos en un papel de hornear para que no se nos peguen.
- Cuando los tengamos todos, calentaremos el aceite a temperatura moderada-alta y los pasaremos a freir, sobre un par de minutos.
- Cuando los tengamos dorados, los iremos poniendo sobre papel absorbente y los iremos pasando por el azúcar.
- Si no los queremos en azúcar, los podremos rebozar en almíbar de miel o con almíbar de naranja.
Ya tenemos listos nuestros pestiños.