Una masa de hojaldre (Se puede comprar en la sección de refrigerados de cualquier supermercado)
Azúcar avainillado
(Complementos a gusto personal)
Miel
Anís
Preparación:
Coger la lámina de masa de hojaldre, sacarla del recipiente, extenderla sobre la mesa de trabajo, y espolvorear con el azúcar avainillado.
Pasar el rodillo de amasar ligeramente por encima , y si nos apetece (es opcional) podemos echar unas gotitas de anís por encima.
Pasar a ir haciendo dobladillos de un par de dedos de ancho desde cada extremo hacia el interior, así hasta llegar al centro.
Empezamos a cortar trocitos del «rodillo doble» que acabamos de hacer, (de un centímetro de ancho más o menos) y ponemos sobre el papel de horno que tenemos ya preparado en la bandeja, dejando un centímetro mas o menos entre palmerita y palmerita ya que en el horno crecerán un poco.
Precalentamos el horno a unos 200º y cuando tengamos todas las palmeritas en la bandeja, las horneamos durante unos 15 minutos más o menos. (Hay que estar pendiente del horno, ya que puede ser algo más o menos según el horno y cómo nos gusten de tostadas).
Cuando estemos a puntos de sacarlas, podemos pintarlas con un poquito de miel para que queden más doradas (pero ojo, se han de dejar muy poquito con la miel, sólo en el último momento de horneado para que esta no se queme). (Un apunte sobre el horno: Si se tiene horno y grill, las dos posiciones son buenas, siempre la bandeja a media altura).
¡Listo! Riquísimos lentes o palmeritas. ¿Cómo lo llamáis vosotros/as? ¿Palmeritas? ¿Lentes? Sea como sea, ¡Veréis que ricas! 😀